Detalles del producto e información obligatoria
Los espaguetis de mar ecológicos proceden de las prístinas aguas de la costa atlántica española y se recolectan de forma sostenible. Esta alga atlántica, también conocida como alga carrizo, tiene hojas largas y finas que se asemejan a los espaguetis, de ahí que lleve este nombre. Su versatilidad la convierte en un ingrediente popular en diversos platos, desde ensaladas hasta platos de pasta. Las algas se secan suavemente al aire para preservar sus nutrientes y son ricas en yodo natural. Debido a su alto contenido en yodo, deben consumirse con moderación.
Características del producto
- 100% ecológico, natural y sin aditivos
- Sin gluten y con calidad de alimento crudo
- Rico en yodo natural
- Secado suave a menos de 40°C
- Uso versátil en la cocina
Contenido
100% alga espagueti de mar (Himanthalia elongata) procedente de la agricultura ecológica certificada.
Preparación
Antes de consumir, lave bien los espaguetis de mar y sumérjalos en agua durante unos 25-30 minutos. A continuación, enjuáguelas y utilícelas como desee en platos como ensaladas, sopas o como ingrediente de pizzas. El remojo multiplica por seis el volumen de las algas.
Ingesta recomendada
Espolvorear 2 g de algas sobre la comida o incorporarlas a los platos todos los días.
Conservación
Almacenar en un lugar fresco y seco y mantener fuera del alcance de los niños.
Envase
Bolsa ecológica de papel kraft con cierre a presión.
Ideal para
- Personas preocupadas por su salud
- Suplementos nutricionales
- Alternativas naturales
- Dietas veganas y vegetarianas
Ventajas
- Rico en yodo natural, favorece la función tiroidea.
- Versátil en la cocina, desde ensaladas a platos de pasta.
- Certificado ecológico y recolectado de forma sostenible, lo que garantiza la máxima calidad.
Notas importantes
Mantener el producto fuera del alcance de los niños.
No superar la ingesta diaria recomendada. Los complementos alimenticios no sustituyen a una dieta sana, variada y equilibrada.
Los espaguetis de mar contienen naturalmente mucho yodo, por lo que no debe superarse la cantidad diaria recomendada de 0,2 mg de yodo para evitar una sobredosis.